Tras ver la película, reflexiona teniendo en cuenta el juego del guionista con el tiempo, descubre cómo el pasado y el presente se mezclan para dar sentido a la historia.
Puedes ver esta presentación antes de responder a las preguntas.
- Identificar los temas principales abordados en la película.
- Selecciona dos personajes, describelos y explica tu elección.
- Elige dos escenas y explícalas.
- Comenta dos frases que te hayan llamado la atención. A continuación tienes algunas pistas para la reflexión:
- La mayoría de nuestras vidas se podrían terminar de escribir mucho antes de que falleciéramos.
- Sabiduría empleada para el bien común no solo para el beneficio propio.
- El final depende del principio
- Siga el camino de grandes hombres que le han precedido.
- ¿Cómo les recordará la historia?
- “Lo importante no es vivir, sino vivir justamente” (Sócrates)
- “¿De qué sirve lo que les enseñan a los alumnos?”
- Si dice que estará aquí mañana a primera hora, estará aquí mañana a primera hora. Yo respondo por él.
- Es la hora, se agotó el tiempo.
- Código de convivencia basada en la confianza mutua. La negligencia voluntaria es inaceptable.
- La juventud pasa, la inmadurez se supera, la estupidez dura para siempre.
- Una oportunidad que se ha dejado escapar se ha perdido para siempre
- Uno cree que lo que le pasa a los 15 años no importa
- “Todos, en algún momento, nos vemos obligados a mirarnos al espejo y ver cómo somos en realidad. Y, cuando llegue ese día, tendrá que afrontar el hecho de haber vivido una vida sin virtud, sin principios. Le compadezco por ello. Fin de la clase”
- “Que quiere que le diga, señor. Me importa un comino. Sinceramente, ¿a quién de ahí fuera le importan sus principios y sus virtudes? Usted, por ejemplo, ¿qué ha conseguido en la vida? Yo vivo en el mundo real, el de la gente que sabe cómo conseguir lo que quiere; y, si hay que mentir y engañar, no importa. De modo que voy a salir ahí y voy a ganar esas elecciones, señor Hundert. Usted me verá por todas partes. Quizá luego me preocupe por contribuir en algo”
5.- Comentario sobre este poema de Gabriel Celaya
EDUCAR
Educar es lo mismo
que poner motor a una barca…
hay que medir, pesar, equilibrar…
… y poner todo en marcha.
Para eso,
uno tiene que llevar en el alma
un poco de marino…
un poco de pirata…
un poco de poeta…
y un kilo y medio de paciencia
concentrada.
Pero es consolador soñar
mientras uno trabaja,
que ese barco, ese niño
irá muy lejos por el agua.
Soñar que ese navío
llevará nuestra carga de palabras
hacia puertos distantes,
hacia islas lejanas.
Soñar que cuando un día
esté durmiendo nuestra propia barca,
en barcos nuevos seguirá
nuestra bandera
enarbolada.
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