Todo tiene su tiempo, el tiempo de descanso es tiempo de parar y hacer memoria de lo vivido.
Cambios de horarios, ritmos y actividades, de lugares, climas y personas, de proyectos y de nuevas ilusiones.
Siempre podemos poner el semáforo en rojo, tiempo de pausa, reducir revoluciones, quitar la marcha y esperar antes de arrancar para seguir el camino.
Tiempo de andar sin zapatos, de pisar tierra mojados, de hundir los pies en la arena y de chapotear en el agua.
Tiempo de cambiar de zapatos, de recorrer senderos, de pisar con cuidado, de llegar a otros lugares inalcanzables sin caminar.
Tiempo de escuchar, a quienes nos encontramos y a nuestro propio corazón, sentimientos y pensamientos...
Mantenernos conectados en red pero con posibilidad de desconectar para encontrar tiempos de silencio que nos llevan al reencuentro personal de la verdad, el respeto y la justicia.
"Al final de nuestra vida, seremos juzgados en el amor." San Juan de la Cruz
Sesión de relajación y respiración.
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